LA GANDARA: MIRADOR DE VERTIGO CON VISTAS UNICAS

Uno de los lugares que no puedes dejar de conocer en Cantabria es el pueblo de la Gándara con su imponente mirador situado en la zona más rural de Cantabria Oriental. El pueblo de La Gándara, pertenece al municipio de Soba, es la primera y más importante población del valle y donde se sitúan algunos de los servicios del municipio.

RIO GANDARA

El río Gándara, tal como te informan en la Oficina de Turismo de Cantabria Oriental Rural “nace de forma más humilde y recorre el Valle, desde Gándara hasta la Cubilla y en Ramales, nada más dejar el Valle, se une al Asón, le engrandece y se pierde en él hasta la mar” aunque a pocos kilómetros de su nacimiento, experimenta unos rápidos que convierten el paisaje en espectacular, dando lugar a las Cascadas del Gándara y estas, al mirador de las cascadas del río Gándara. En otros tiempos había en la orilla de este río una serie de molinos harineros, una fábrica de harinas y varias herrerías que aprovechaban estas aguas para su funcionamiento…

EL MIRADOR

Para llegar al Mirador tendrás que dirigirte por la carretera secundaria CA-256 y acercarte al pueblo de Gándara, buscando aparcar en el Centro de Interpretación de los Collados del Asón, que puedes visitar para informarte sobre todas los sitios más reseñables de esta preciosa comarca. Desde el mismo edificio, por un magnífico robledal, pasearemos 100 metros hasta el Mirador doble y aéreo que nos permitirá disfrutar del nacimiento del río Gándara desde sus sumideros calizos.

Aquí otra cosa no pero se respira paz por todos lados. ¡Qué sentimiento de tranquilidad y bienestar! Las vistas hablan por sí solas, ¿A qué sí? Podríamos pasarnos horas contemplando lo que tenemos delante.

Otra mención aparte se merece la obra de ingeniería que supuso la construcción de este mirador que ya destaca por sí mismo. Se encuentra ni más ni menos, en su mayoría, en el vacío del curso del río.

En época de lluvias la vista es espectacular ya que desde el mirador no sólo podemos ver el descenso del río, sino que también podemos ver los pequeños pueblos del municipio que regalan un espectáculo fabuloso, desde el verde intenso de los campos a los azules de un cielo limpio y sin contaminación.